En estos días de frío y de mal tiempo típicos del invierno, muchas veces no podemos salir de casa y debemos buscar actividades divertidas para hacer con los niños. Hoy os propongo pintar con acuarela gracias al libro “Acuarela. Dibujo y pintura para niños”de la editorial Monsa. A continuación os explicaré en qué consiste el libro y os enseñaré algunos de los proyectos que hemos realizado gracias a él.
En unas de nuestras visitas a la biblioteca descubrimos este libro. Siempre que veo un libro interesante no me puedo resistir y se vino con nosotros a casa. Y la verdad es que no nos defraudó. Es un libro totalmente práctico donde se desarrollan 11 proyectos diferentes para hacer en acuarela y aprender el uso de diferentes técnicas de esta disciplina.
Todos los proyectos tienen en común la misma estructura:
- Primero se explica qué se va a dibujar, los materiales y los colores que vamos a usar.
- Siempre hay un consejo para hacer el proyecto.
- Seguidamente se explica paso a paso lo que se va a hacer. No se describe el trabajo a seguir únicamente con texto, sino que está acompañado de una foto de cada fase del dibujo para no perder ningún detalle del proceso.
En nuestro caso ha sido el primer acercamiento a la acuarela tanto para los niños como para mí. Y pintar con ellos me ha dado confianza para luego probar a pintar otros dibujos por mi cuenta.
MATERIALES QUE NECESITARÉIS
- Papel blanco. Nosotros usamos hojas de un bloc de dibujo que tienen más gramaje.
- Pinceles de varios grosores.
- Acuarelas de varios colores.
- Vaso con agua.
- Esponja.
- Cepillo de dientes.
- Cera blanca.
- Un trozo de una bolsa de plástico.
- Sal.
- Lápices de colores
- Servilletas de papel
- Babero o similar, si queréis que no se llenen.
BASES DE LA ACUARELA
Esta técnica se basa en el uso del agua. Mientras más agua se utilice el color quedará más suave y mientras menos agua emplees el color será más intenso y oscuro. A su vez podemos humedecer el papel previamente para conseguir mayor efecto. ¡Pero cuidado no es recomendable mojar demasiado el pincel sino hay riesgo de que el papel se rompa!
Otra aspecto a tener en cuenta es el pincel: dependiendo del pincel que usemos podremos cubrir mayor o menor superficie del papel.
EFECTOS ESPECIALES DE LA ACUARELA
En el libro también se explican cómo usar diferentes herramientas para conseguir efectos pictóricos como los siguientes:
- Uso de la sal para dar efectos muy bonitos del agua, como en la foto inferior.
- Uso de cepillo de dientes: lo llenamos de pintura y deslizamos el dedo por los pelos para salpicar el dibujo con la pintura. Obtendríamos un efecto de la arena.
- Uso de cera blanca para repeler la pintura para conseguir el efecto de nieve.
- Uso de plástico arrugado sobre la pintura. Lo colocamos sobre el dibujo húmedo obteniendo texturas marinas.
- Uso de la esponja para obtener texturas, como un prado de flores. Se darían suaves golpecitos sobre el papel para crear manchas de pintura.
- Y también se puede perfilar con lápices de colores una vez que el dibujo esté seco para darle mayor profundidad.
NUESTRA EXPERIENCIA
A la hora de realizar los proyectos yo me encargaba de hacer el dibujo inicial y luego ellos se encargarían de pintarlo con acuarela, usando a su vez los materiales para lograr los “efectos especiales” para mejorar el resultado final.
Seguíamos paso a paso todas las fases de los proyectos del libro y de una manera muy fácil y amena nos guiaba sin problema hasta alcanzar terminar nuestra “obra de arte”. A continuación os muestro unas páginas del libro donde muestra el proyecto para pintar un árbol y luego aparecen varias fotos de nuestro proceso de pintura.
Mis dos hijos pequeños tienen cinco años y reconozco que en los primeros dibujos les ayudé a pintar en algunos momentos que el dibujo requería más precisión. Pero a la vez que íbamos avanzando en los trabajos que proponía el libro, ellos tomaron más confianza y les dejé libertad absoluta, no quería coartar su libertad creativa. Quizás no salía tan perfecto pero las obras eran suyas 100% y se sentían muy orgullosos. Hay que permitirles que se equivoquen, ¡no pasa nada! Es importante errar en el camino para mejorar y adquirir confianza.
No es la perfección lo que hace una obra única sino las pequeñas imperfecciones que pueda tener. Son esos pequeños detalles los que hacen una obra especial.
Os recomiendo esta actividad para hacerla con vuestros hijos, os pueden sorprender. A pesar de que mis hijos son bastante inquietos les ha encantado pintar con la acuarela los diferentes proyectos. Durante esos momentos se concentraban en su dibujo, su pincel y la pintura y sus rostros se llenaban de satisfacción al ver cómo avanzaba su obra.
Este tipo de actividades requiere algo de tiempo y tranquilidad. Las prisas no son buenas a la hora de dibujar, especialmente la acuarela, ya que en ocasiones hay que esperar a que se sequen las zonas pintadas para que no se mezclen los colores. Y cuanto más rápido se pinte menor precisión tendrá nuestro trazo.
Aprovechad este rato de pintura para desconectar de todo, tanto los niños como los mayores. Sólo importa vuestro dibujo o proyecto. Yo lo denomino “momento slow”.
Como en el libro de la editorial Monsa hay once trabajos de acuarela necesitaréis un período de tiempo prolongado para poder llevarlos a cabo todos. Por ello, en estos días de invierno, que no apetece salir de casa o que el mal tiempo lo impide, son perfectos para disfrutar pintando y tener vuestro momento de desconexión.
Para mí pintar es hacer magia. A partir de un papel en blanco van surgiendo las líneas, las formas y las figuras. Luego aparece en escena el color y usando el pincel o lápiz como varita lograremos las texturas y las sombras. Así creamos nuestra propia visión del mundo real o imaginario.
¿Y a vosotros? ¿Os apetece disfrutar de un rato pintando en familia? ¿Qué os ha parecido el libro y los trabajos que hemos realizado? Si os animáis nos encantaría que compartierais con nosotros el resultado de vuestras sesiones “slow” de acuarela. Y como siempre ¡vuestros comentarios son bienvenidos!
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