El mes de febrero en casa es un mes de celebraciones, tanto el papi como yo cumplimos años. Por ello quería mostraros un juego de mesa con temática de fiesta de cumpleaños, donde hay tarta y hay que soplar, pero sustituimos las velas por una bola. Hablamos de “Soplar el pastel” de Haba. ¿Queréis conocer más sobre él? Acompañadnos y os enseño cómo se juega a este divertido juego y los beneficios que tiene su uso en los niños.
Elementos del juego
La caja del juego es en sí mismo el tablero para jugar. En él aparece una mesa preparada para celebrar el cumpleaños con diferentes tartas: gelatina verde, tarta de limón, de fresa, de arándanos y pastel de chocolate. ¡Qué festín!
Sobre el tablero debemos mover una bola, que puede ser de corcho o de madera. Para iniciarse en el juego recomiendo comenzar con la bola de corcho que pesa menos. Cuando seamos unos expertos podemos pasar al siguiente nivel de dificultad con la bola de madera.
¡Comienza la fiesta de cumpleaños!
Para comenzar a jugar debemos colocar la bola en el plato situado en la parte inferior del tablero. Cuando estamos preparados comenzamos a soplar para mover la bola. Fácil, ¿no? Pero lo que no os había dicho aún es que… ¡el tablero está inclinado! Al soplar la bola subirá en el tablero pero si dejas de hacerlo bajará. Si eso ocurre no pasa nada. Sigue intentándolo hasta que la bola caiga en uno de los agujeros.
¡Ojo! ¡No puedes mover el tablero con las manos! Por ello, el juego recomienda situarlas en la mesa o detrás de la espalda.
Objetivo del juego
El objetivo es encestar la bola en los agujeros que hay en el centro de las tartas. En la foto de arriba podéis ver cómo hemos conseguido llegar a la tarta de limón. Cuando esto ocurre ganamos la ficha redonda de la tarta que hemos logrado, en este caso sería la amarilla. Y abajo podéis ver las diferentes fichas que corresponden a las tartas del tablero.
Cuando obtenemos dos fichas de la misma tarta ganamos una porción de nata. Acto seguido devolvemos las fichas redondas y termina la ronda.
Fin de la fiesta
La fiesta de cumpleaños o partida acaba cuando se acaban las porciones de nata. En total hay cinco. ¡Ganará el jugador que tenga más porciones!
Más difícil todavía
Podemos hacer que la dinámica del juego sea más compleja:
- Usando la bola de madera en vez de la bola de corcho.
- Si inclinamos aún más el tablero.
También hay un modo de juego para profesionales: el jugador que consiga 4 fichas redondas soplando y llevando la bola al agujero correcto ganará la partida.
Y mis peques se han inventado una nueva manera de jugar. Han colocado porciones de nata como obstáculos para que sea más complicado que la bola llegue a las tartas. Es bueno dejarles libertad a la hora de jugar, pueden sorprenderte con su creatividad.
Beneficios del juego
Básicamente “Soplar el pastel” es un juego de habilidad que consiste en soplar una bola. De esta manera se ejercita la motricidad de la boca y labios y a su vez el desarrollo del habla. Gracias al juego los niños pueden aprender a controlar la respiración y a dominar la duración y la potencia del aire.
Este es un juego que usan los logopedas ya que la práctica del soplo puede ayudar a los niños a superar problemas de lenguaje. Y lo mejor de todo, ¡de una manera divertida!
Es un juego ágil y rápido. ¡Y menos mal que es así, porque si su duración fuera más larga nos quedaríamos sin aliento después de tanto soplar la bola!
En definitiva, “Soplar el pastel” es un juego muy divertido que puede usarse también con fines terapéuticos.
¿Qué os ha parecido este juego? ¿Lo conocíais? Vuestros comentarios son siempre bienvenidos.
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